Los aeropuertos de Londres-Heathrow, Berlín y Bruselas sufrieron este fin de semana fuertes interrupciones por un ciberataque contra los sistemas de registro y equipaje. Miles de pasajeros quedaron varados, se multiplicaron los retrasos y aumentan las dudas sobre la seguridad digital en la aviación europea.
Un ataque coordinado golpea sistemas críticos
Este sábado, tres de los principales aeropuertos de Europa —Heathrow en Londres, Berlín y Bruselas— enfrentaron retrasos masivos y cancelaciones de vuelos tras un ciberataque que afectó al software de registro de pasajeros y equipajes. La empresa Collins Aerospace, proveedora de tecnología aeronáutica, confirmó que su sistema MUSE sufrió “una disrupción vinculada a ciberataques” en varias terminales.
Según las autoridades aeroportuarias, el ataque se concentró en los sistemas electrónicos de check-in y depósito de maletas, obligando a los equipos a operar manualmente. En Bruselas, la incidencia comenzó la noche del viernes y a mediodía del sábado todavía no estaba resuelta. Al menos 10 vuelos fueron cancelados y 17 tenían retrasos superiores a una hora.
Periodistas presentes en las terminales de Londres y Bruselas constataron largas filas frente a los mostradores y pantallas plagadas de avisos de cancelación. “Nuestros sistemas propios no parecen afectados, pero el proveedor externo está comprometido”, señalaron fuentes del aeropuerto belga.

Caos en las terminales y advertencia sobre vulnerabilidad digital
En Heathrow, el aeropuerto más importante de Londres, se observaron colas de hasta tres horas. Los empleados debían escribir a mano las etiquetas del equipaje y apenas dos mostradores estaban operativos para vuelos internacionales. “Estábamos furiosos. Tuvieron que escribir nuestras etiquetas a mano”, relató a la prensa Maria Casey, una viajera británica cuyo vuelo a Tailandia vía Abu Dabi se retrasó horas.
El organismo europeo Eurocontrol pidió a las aerolíneas reducir la mitad de las operaciones en Heathrow durante el fin de semana. En Berlín, las autoridades también informaron de “problemas técnicos con un proveedor” y pidieron a los pasajeros verificar con antelación el estado de sus vuelos.
Collins Aerospace aseguró que trabaja para restablecer los sistemas “lo antes posible” y reconoció que no puede ofrecer detalles sobre el origen ni la magnitud exacta del ataque.

Una amenaza en aumento para la aviación
El incidente se suma a una tendencia global de ciberataques contra el transporte aéreo. Según un informe del grupo tecnológico Thales, entre enero de 2024 y abril de 2025 se registraron 27 ataques tipo ransomware en la aviación, un incremento del 600% en un solo año. Las víctimas van desde aerolíneas y aeropuertos hasta sistemas de navegación y contratistas.
En julio de 2025, la australiana Qantas sufrió el robo de datos sensibles de seis millones de clientes, mientras que Japan Airlines fue atacada en diciembre de 2024. Expertos advierten que la creciente digitalización del sector lo hace cada vez más vulnerable y que es urgente reforzar las defensas cibernéticas para evitar paralizaciones masivas como la de este fin de semana en Europa.