Claves para entender la crisis diplomática entre Perú y México tras el asilo a Betssy Chávez

El Gobierno de Perú anunció este lunes la ruptura de relaciones diplomáticas con México tras conocerse que el país norteamericano otorgó asilo político a Betssy Chávez, ex primera ministra del expresidente Pedro Castillo.

La decisión, comunicada por el canciller Hugo de Zela, fue calificada como una respuesta a un “acto inamistoso” y a las “reiteradas intervenciones” del actual y del anterior gobierno mexicano en los asuntos internos del Perú.

“El Gobierno peruano ha decidido romper relaciones diplomáticas con México”, afirmó De Zela, señalando que el asilo a Chávez “obliga al Perú a tomar una decisión dolorosa pero necesaria”.

El canciller aclaró que la medida no afecta los vínculos consulares, por lo que las embajadas seguirán prestando servicios a los ciudadanos de ambos países.

¿Quién es Betssy Chávez y por qué genera conflicto?

De origen aimara y abogada de profesión, Betssy Chávez fue una de las figuras más leales al exmandatario Pedro Castillo. Ocupó los ministerios de Trabajo, Cultura y finalmente la Presidencia del Consejo de Ministros en las semanas previas al fallido intento de golpe de Estado del 7 de diciembre de 2022.

Chávez está acusada de ser coautora de la intentona golpista, motivo por el cual fue detenida en 2023 y permaneció más de un año en prisión preventiva. En septiembre recuperó la libertad por orden del Tribunal Constitucional, que consideró arbitraria su detención.

Desde entonces debía asistir a audiencias judiciales, pero dejó de hacerlo a fines de octubre. Días después se confirmó que se encuentra en la Embajada de México en Lima, donde solicitó asilo político alegando persecución judicial.

Una ruptura con consecuencias regionales

El gobierno de Dina Boluarte consideró el gesto mexicano una “injerencia directa” y acusó a Claudia Sheinbaum de dar continuidad a la política de su antecesor, Andrés Manuel López Obrador, quien también había defendido públicamente a Castillo.
México, por su parte, argumenta que Chávez es víctima de una persecución política y que el asilo responde a principios humanitarios.

Aunque Lima aseguró que no planea ingresar a la embajada —en alusión al caso ecuatoriano de Jorge Glas en 2024—, la decisión deja en suspenso la cooperación bilateral y paraliza la participación de Perú y México en la Alianza del Pacífico.

La ruptura marca el momento más tenso entre ambos países en más de treinta años y refleja la profunda división política e ideológica en América Latina, donde los gobiernos progresistas y conservadores chocan en torno a la legitimidad de los procesos judiciales y las causas políticas.

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